La Plataforma de Edificación Passivhaus (PEP) ha presentado un conjunto integral de propuestas para promover la edificación y rehabilitación de inmuebles energéticamente eficientes, adaptando el parque inmobiliario a los desafíos ambientales actuales. Estas sugerencias para la construcción eficiente de edificios, según ha informado en un comunicado, las presentarán al Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana cuando se abran las mesas de trabajo del programa ARCE2025.
Las propuestas de la PEP incluyen tres ejes fundamentales de actuación.
- La primera medida contempla bonificaciones en impuestos locales como el IBI (Impuesto sobre bienes inmuebles) y el ICIO (Impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras) a los inmuebles que certifiquen una eficiencia energética superior al mínimo normativo exigido
- La segunda propuesta para la renovación y construcción eficiente de edificios sería agilizar los trámites de licencia de obra para proyectos que se presenten con una certificación previa acreditada.
- La tercera iniciativa propone un programa de subvenciones para los procesos de certificación energética con el que facilitar el coste de los procesos de certificación y favorecer que los agentes del proceso constructivo emprendan proyectos con estos niveles de eficiencia energética.
Para justificar sus medidas, la PEP considera que la actual Ley de Haciendas Locales permite bonificaciones para instalaciones de energías renovables, pero no contempla la posibilidad a edificios que reduzcan su demanda por métodos pasivos.
Por otro lado, la obtención de licencias de obra se ha convertido en uno de los trámites más demorados a la hora de comenzar a construir un edificio, por las numerosas comprobaciones que deben realizarse desde la Administración.
En el caso de que se admitiese la certificación en los estándares más exigentes como parte de la documentación a presentar, la PEP considera que se podría reducir el trabajo de las administraciones públicas, acortando de esta manera los plazos, lo que supondría un importante incentivo para realizar proyectos eficientes energéticamente y certificados.
En cuanto a las subvenciones en los procesos de certificación, desde la Asociación ponen el ejemplo del Programa ERAIKAL del Gobierno Vasco, que subvenciona la implantación y acreditación de certificaciones destinadas a las edificaciones y que ha demostrado ser un importante estímulo para los promotores.
Promover la construcción y rehabilitación con estrategias pasivas de eficiencia energética
Para la Plataforma Passivhaus, aprobar estas medidas sería un primer paso para promover la construcción eficiente de edificios y rehabilitación con estrategias pasivas de eficiencia energética, aquellas que suponen buscar la mínima demanda de energía posible al mismo tiempo que se asegura una alta calidad de ambiente interior.
Según su presidente, Arturo Andrés, “esto se consigue construyendo y rehabilitando con unos criterios de aislamiento térmico y acústico, hermeticidad, ventilación y protección solar que consiguen, en el caso del estándar Pasivhaus, ahorrar al menos un 75% de las necesidades de calefacción y refrigeración.”
Arturo Andrés, presidente de PEP, enfatiza la importancia crítica de las estrategias pasivas en la construcción eficiente de edificios. Estas técnicas no solo reducen significativamente la demanda energética de los edificios sino que también mejoran la calidad del ambiente interior.
A pesar del gran problema actual en España es la falta de vivienda accesible, desde la asociación advierten de que esta urgencia esconde otro gran desafío: la necesidad de adecuar el parque edificado a la Directiva Europea de Eficiencia Energética en la Edificación para conseguir que los edificios sean progresivamente más eficientes hasta llegar a la neutralidad del parque edificado en 2050.
Por ello, recuerdan, el objetivo de alcanzar la neutralidad climática para 2050 requiere una transformación profunda del sector de la construcción y las medidas propuestas facilitarían esta transición y acelerarían la adopción de prácticas constructivas sostenibles.
Las estadísticas actuales revelan la magnitud del desafío en España. El 55% de los edificios existentes se construyeron antes de 1980, cuando las normativas de eficiencia energética eran inexistentes o muy básicas. Más preocupante aún, el 80% del parque inmobiliario actual presenta una calificación energética deficiente, situada entre E y G en la escala de certificación.
El plan del Ministerio de la Vivienda para adecuar el parque edificado a la nueva directiva europea se recoge en el recién presentado proyecto ARCE (Arquitectura Cero Emisiones) 2050, una iniciativa que busca liderar la descarbonización del parque inmobiliario español y sus ciudades, promoviendo una transición energética sostenible. Desde la Plataforma de Edificación Passivhaus señalan la importancia de focalizarse en las medidas pasivas para evitar emisiones antes de que se produzcan y como paso necesariamente previo a la sustitución de fuentes de energía por otras más eficientes y/o de origen renovable.

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